quinta-feira, 22 de janeiro de 2009

Navegante

Navego mis mares vida, tardes de nada,

como ceniza que viene con la noche hecha,

una estrella, otras cai en el horizonte a lo lejos,

como si fuesen goteras, una a una perdida.





Bebo olas grandes de nostalgia de la tierra,

los ojos empañan como vidraças en la neblina,

un amor pobre que trae frío y calor,

el cuerpo en brasa quema como tora en la ladera.





Camino vientos mares navegantes de mim,

atajo promesas de ángeles moucos,

grito mi amor-pasión con efecto escénico,

nada es azul, el mar o el arco-iris, tudo mentira.





Velas al viento, como diría si hubiese una nave,

la vida para en el medio de un espejo de agua,

millares de promesas sumergen,

en cuanto nubes encubren una vida.

Sem comentários: